EN BUSCA DEL OSO HERIDO

ayy Abuelu, si vieras en lo que esta tu Asturias del alma.....los lobos ya casi no existen y las raposas andan con miedo, mas arriba del Chalopena hay un bosque de molinos eólicos, del pinar de los caballos solo el puerto se salva... ... mataron la manzanilla del borde del camino con el alquitrán de la carretera, como ya casi no quedan animales en la casa para quien cogerla por si enferman............., y los matos, siguen fuertes... ... pero ya nada es lo mismo....mira lo que han hecho con uno de tus osos, recuerdas... ... cuando recogiste en el establo a las dos oseznas a las que un furtivo dejo huérfanas........yo si recuerdo como te pateaste el monte con los del Icona.....hasta que disteis con ellas....... y como nos decías, mirar pobrecitas tienen miedo....................





Los esfuerzos por localizar a un oso herido y proceder a su cura continúan entre los concejos de Degaña y Páramos del Sil, por una franja de unos 500 y 1.000 metros de anchos entre Asturias y Castilla y León. El animal fue herido hace diez días por un lazo utilizado por los cazadores furtivos, lo que le ha dejado muy dañada la zona de la cintura.
En la jornada de ayer tres equipos salieron en su búsqueda, dos desde tierras castellanoleonesas y el tercero desde Asturias, aunque no pudieron localizar al plantígrado. Guillermo Palomero, presidente de la Fundación Oso Pardo, confirmó que en los grupos de búsqueda estaban trabajando miembros de su organización y que los tres equipos caminan armados con dardos anestésicos «dado lo imprevisible del comportamiento de un animal salvaje herido». También portan el material médico necesario para poder efectuarle las curas en caso de dar con él.
El animal fue localizado por primera vez el día 19 por el personal de la Fundación Oso Pardo tras recibir el aviso de un particular en territorio de León. El animal sufre una aparatosa herida en la zona de la cintura provocada por un lazo de acero utilizado normalmente por cazadores furtivos para atrapar jabalíes, ciervos y corzos. La lesión le impide moverse con normalidad, por lo que camina encogido.
«Puede morir»
«El lazo sigue apretado muy fuerte y la herida está ya descarnada. Si no se le cura rápido, se le puede infectar y morir, a pesar de la fortaleza del animal», explicó Guillermo Palomero. La última vez que se vio al oso fue hace dos días, aunque ayer ya no estaba en el mismo lugar. El presidente de la Fundación Oso Pardo confía en que todavía esté bien pues en el último avistamiento «estaba comiendo arándanos y que tenga ganas de alimentarse es una buena noticia».
La búsqueda continúa y las tareas para localizarlo se mantendrán por lo menos dos semanas más, si no lo encuentran antes. El plazo de quince días viene marcado por la temporada de arándanos, periodo en el que los osos se muestran más visibles. La necesidad de encontrarlo en esas fechas es alta: si no se localiza al animal «las opciones de que sobreviva serán muy pocas», sentencia Guillermo Palomero.