Izquierda, Derecha, y el Futuro de la Humanidad
Si a alguien en España se le ocurriese realizar el experimento de preguntarle a cualquiera en la calle “En qué consiste la Gravedad?” con seguridad nos encontraríamos con disparidad de respuestas, a cada cual más absurda y estúpida excepto la humilde realidad, y única respuesta válida por el momento: “No lo sé”. Y es que sí, la realidad es que ni tú ni yo sabemos en qué consiste la gravedad. Es una cuestión que trae de cabeza incluso a los los más prestigiosos y experimentados físicos y pensadores.
Einstein la tuvo en cuenta, pero no supo explicarla. Haisch, Rueda y Puthoff quizá se acercaron, pero pocos les hicieron caso y bien puede ser que estén equivocados. Pues con la Derecha e Izquierda en España pasa lo mismo, que todo el mundo en España sabe lo que es, pero nadie sabe explicarlo con exactitud sin aludir a burda imaginería de tiempos de fantoches trasnochados.
Todos sabemos en España que la Izquierda es la “Amiga de la Humanidad”, la creadora de bienestar social, la protectora de las minorías, defensora de la teoría de la igualdad, a favor del medio ambiente, etc, etc…
Afrontémoslo.
Estas son algunas de las premisas básicas que vienen a la mente de un individuo de izquierdas (o “progre” de aquí en adelante) cuando trata de definir su arena política.
Y si le preguntamos su definición de la Derecha, su respuesta, invariablemente será: “Esos fachas, que explotan al obrero, expolian el medio ambiente e imponen el Sistema del Capital que llevará al mundo a la autodestrucción… el pobre más pobre y el rico más rico”. Reconozcamos que así piensa la Izquierda en estos días. Terrible!
Esta visión del mundo político es la visión de críos de bachillerato. Pero todos sabemos que es la visión política que predomina en este país.
Toda mi vida he leído relatos de No Ficción y Ciencia Ficción, y hace mucho tiempo atrás en 1981, tras ver el despegue del Transbordador Columbia en su primera misión emitida por televisión, albergué la esperanza de que para el año 2000 la Humanidad estaría ya viviendo en la Luna y en Marte, y la pobreza erradicada, a lo “Buck Rogers” Llegue a tener ideas (hoy en día ridículas) de que para el 2000 todo el mundo debía saber manejar un computador (e insisto en esta palabra y no la corrupción francesa ordinateur) y pilotar una nave espacial, pues sería moneda corriente en esos días.
Hoy en día estamos en el 2011 y me da la risa cuando veo a mi alrededor. ¿Qué ha pasado? Estamos evolucionando, estancados o estamos en regresión? Decidí investigar las causas de tanto atraso y tras años de observación y análisis llegué a la terrible conclusión:
Las ideologías de izquierdas son las culpables de tanto atraso y además, sin saberlo, amenazan el futuro de la Civilización en la Tierra. Trataré de que no sea un ladrillo, pero expondré algunas observaciones:
La izquierda cree que ser de izquierdas es ser “buena persona” y ser de derechas es ser malvado. De esta manera, intentan siempre “hacer el bien”, “quedar bien con todos” y siempre generan desastres. Intentando ser buenos todo el tiempo, a menudo caen en el vicio de practicar lo contrario de lo que predican, y caen en la pasivo-agresividad. La sociedad que generan en conjunto suele convertirse en un infierno viviente para aquellos que muestran algo de carácter y personalidad.
La Derecha sabe que tener una conducta ejemplar consiste en hacer el bien cuando es necesario y ser “malo” cuando la ocasión llama a ello, resolviendo las dicotomías fluidamente y manteniendo de esta forma una más sana coherencia mental. Reconociendo que es natural que un individuo con personalidad tenga tanto amigos como enemigos, las relaciones con respecto a ambos son normalmente fructíferas para las dos partes.
El progre no tiene fe en sus habilidades individuales debido a su forma de vida colectivista y esta actitud mental le lleva a tener toda una serie de complejos que hacen que, en el momento que es puesto en posiciones de autoridad, haga abuso de ella, mostrando el despreciable comportamiento del individuo que se muestra sumiso ante sus superiores y cruel con sus subordinados.
Un individuo de Derecha tiene fe en sus habilidades, pero no se duerme en los laureles; lucha por mejorarlas. De esta manera desarrolla un carácter propicio a mejorar las circunstancias de la organización, mostrándose crítico con sus superiores y tratando a sus subordinados con candor, y una política de puertas abiertas.
La izquierda cree que los empresarios explotan a los obreros y los mantienen en régimen de esclavitud. De esta forma alimentan un mito que lleva a los empleados a trabajar descorazonados y en tono pesimista, lo cual no es bueno para ninguna organización ni para la salud física y mental de los empleados.
La Derecha sabe que un empleado no está atado a su patrón; es libre de marcharse y buscarse un empleo en mejores condiciones si lo desea. Sólo necesita la voluntad de hacerlo.
La izquierda es rígida y dogmática; como los católicos. Creen en utopías, desconocen el carácter humano,no cambian su punto de vista ni teniendo la evidencia delante. Luchando contra la Realidad Objetiva, saben que el único camino es lograr una masa crítica de votos, usando las más sucias estrategias para lograrlo. Una vez asaltado el Poder, el saqueo es la norma..
La Derecha sabe que el mundo no es perfecto, de la misma forma que el movimiento de los planetas no lo es; saben que no hay que “luchar por la perfección” sino más bien “ir corrigiendo los errores” a medida que se va avanzando, haciendo uso del método científico y herramientas como el falsacionismo de Popper. De esta manera se aspira no a un futuro sin incertidumbre, sino con cada vez menos errores.
La Izquierda cree que la definición de Capitalismo es robar, contaminar, expoliar y crear conflicto en otros países.
De esta manera, quieren acabar con el sistema que liberó a la Humanidad del Feudalismo y volver a la Edad Media, estableciendo un sombrío Estado Policial
La Derecha sabe que la definición de Capitalismo, es, básicamente, tener la libertad de tratar unos con otros no como aristócratas y esclavos, sino como “partners” intercambiando bienes y servicios libremente. No es un sistema perfecto, pero en la corrección de errores y no en la regresión está la solución.
La Izquierda quiere -y esto es lo que considero más peligroso- limitar y tasar las emisiones de CO2 porque erróneamente piensa que es culpable del calentamiento global, (el vapor de agua es responsable de más del 80% del efecto invernadero; lo van a prohibir también??) y así cobrar beneficios ricamente a costa de la producción de otros. Parasitismo legal llevado al último nivel. Esto no es el único problema, otro problema es que los países que están en vías de industrialización pasarán necesariamente por un proceso en el que contaminar será inevitable. Con las exorbitantes tasas sobre el CO2 que quieren imponer los partidos de izquierda, esto significará un golpe mortal para la industria en esos países. La ironía es que la Izquierda siempre trata de mostrar un lado sensible frente a los problemas de los países en vías de desarrollo, como las iniciativas del 0’7% . Por supuesto, un 0’7% son migajas comparado con destruir el tejido industrial de un país.
Las políticas proteccionistas de los partidos izquierdistas europeos ponen en peligro el comercio con el Tercer Mundo.
La Derecha sabe que que la solución no está en la regulación, sino en el desarrollo de medidas tecnológicas para contrarrestar los efectos nocivos que los subproductos de la industria genera sobre el medio ambiente.
La Izquierda cree que el ciudadano medio es estúpido y no tiene posibilidad de mejorar, de esta manera trata de convencer a la población de que es necesario un “Estado Niñera gobernado por iluminados” que vele por el ciudadano desde la cuna a la sepultura, convirtiéndolo en un infante humillado y sin ambición y asegurando una profecía que se auto-cumple.
La Derecha sabe que todo individuo tiene posibilidad de mejorar, y que la misión del Estado es dar poder al individuo, permitiendo acceso a un sistema educativo eficaz, y luego asegurar los derechos negativos (derecho a la vida, a la propiedad, a la búsqueda de la felicidad) haciendo de Juez, Policía o Ejército cuando nuestros derechos se ven violentados. Y ahí acaban sus funciones.
La Izquierda cree que el Hombre es un medio para otros hombres. De esta manera, busca tener influencia sobre ellos para poder manipularlos a su antojo.
La Derecha cree que el Hombre es un fin en si mismo y para sí mismo, y que busca poder no sobre otros hombres, sino sobre sí mismo, la Naturaleza y el Universo. De esta forma, es capaz de crear el grado de bienestar del que disfrutamos en estos días.
La Izquierda cree que todos somos iguales y debemos marchar al compás.
La Derecha sabe que no existen 2 personas iguales en este planeta y respeta las diferencias individuales, contribuyendo a la Biodiversidad.
La Izquierda muestra rechazo y desdén por el Progreso y la Tecnología, despreciando a sus creadores e inspiradores e ignorando que son manipulados por las oligarquías, cuya filosofía es profundamente de izquierdas; éstas actúan suprimiendo nuevas invenciones y ralentizando el progreso.
La Derecha sabe que la Tecnología es como un cuchillo: Dáselo a un cocinero o a un asesino y obtendrás resultados diferentes.
La Derecha sabe que, a pesar de dudosas estadísticas, el rico es más rico, y el pobre… más rico.
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