martes, 1 de junio de 2010

TU OJO GOLPEA MI PUÑO.


 Dice el ejército israelí que sus muchachos actuaron “en legítima defensa”, y cuesta encontrar una mentira mayor en apenas tres palabras. La masacre de ayer no fue legítima. A israel no le asiste derecho alguno para asaltar un barco en aguas internacionales, como tampoco lo tiene para bloquear la franja de Gaza, la mayor cárcel del planeta. También es un insulto la palabra “defensa”, cuando ni siquiera se conoce aún el número exacto de muertos y heridos y la única certeza es que no hubo ni una sola baja israelí. ¿De qué se defendían sus barcos de guerra, sus helicópteros, sus soldados con ametralladoras? ¿De palos y piedras? ¿De ferrys desvencijados, cargados con ayuda humanitaria? ¿De conocidos terroristas, como una docena de parlamentarios europeos, el escritor Henning Mankell o una Nobel de la Paz? ¿De tirachinas, tan peligrosos como la honda de David? ¿De una protesta pacífica contra el injusto bloqueo de Gaza?

El ejército israelí difundió ayer algunas imágenes de la masacre, que al parecer grabaron completa con varias cámaras. Es el montaje del director, y en la película sólo se ven unos pocos planos, aquellos que interesan para su propaganda. Espero que, con el DVD, también incluyan todos los extras: el metraje que ahora ocultan. O que algún día la cinta se estrene en el Tribunal Penal Internacional. Aunque tal vez sea una película de fantasía, donde los muertos se suicidan y las decenas de heridos son violentos agresores, que intentan golpear con sus ojos los puños de los soldados, esos asaltantes que tomaban a punta de pistola un barco “en legítima defensa”. ¿Defensa de qué? “Ya no defendemos israel”, dice una voz sensata desde el periódico israelí Haaretz. “Defendemos el bloqueo a Gaza, que se está convirtiendo en el Vietnam de israel”.